Los efectos de la metanfetamina que se experimentan tras su consumo se pueden resumir en 7 etapas.
Etapas en los efectos de la metanfetamina
La primera etapa se inicia cuando se empiezan a sentir los primeros efectos de la metanfetamina, el aumento del ritmo cardiaco, el aumento de la presión arterial… Esta etapa de “acelerón” puede durar hasta media hora.
La segunda etapa puede durar entre 4 y 16 horas, y es una etapa en la que uno se siente muy inteligente, más que el resto, y se puede poner a discutir con mucha facilidad. También puede darse que se centre en algo de forma muy intensa, puede ser desde algo importante a algo insignificante.
En la tercera etapa llega el desenfreno, donde la hiperactividad se adueña del cuerpo y existe un impulso que obliga a consumir más y más droga, pudiendo durar entre 3 y 15 días en este estado.
La cuarta etapa se inicia cuando después del desenfreno la droga ya no produce ningún efecto sobre el cuerpo y el consumidor entra en un estado de alucinaciones constantes, viviendo en su propio mundo y con un gran sentimiento de vacio.
Cuando el cuerpo dice basta se conoce como la quinta etapa. Tras no poder soportar los efectos de la metanfetamina el cuerpo acaba colapsando, lo que acaba resultando en un largo período de sueño y descanso.
Tras este sueño prolongado los efectos de la droga se hacen patentes en el cuerpo, el hambre y la deshidratación son más que evidentes en el cuerpo, y el consumidor está exhausto en todos los sentidos. El problema de esta sexta etapa es que para muchos consumidores, la solución es volver a consumir metanfetamina.
La última etapa sólo se produciría tras un período de al menos un mes sin consumir. En esta etapa aparece la ansiedad, la pérdida de energía vital y la necesidad de volver a consumir. La metanfetamina es una de las drogas más difíciles de dejar debido a su elevado potencial de adicción, por lo que resulta tremendamente complicado retirarse por completo de la metanfetamina.